No hubo pases de factura ni reproches. Fueron dos horas que el presidente Javier Milei dedicó de su tiempo para recibir, escuchar y agradecer al bloque de diputados de la UCR, un gesto de cordialidad que sorprendió incluso a los radicales más prevenidos y menos cercanos al oficialismo. El encuentro, que se desarrolló este mediodía en la Casa Rosada, sirvió para limar asperezas del pasado pero, sobre todo, para exhibir a propios y ajenos una sintonía política de cara a las elecciones legislativas del año próximo.